Unf*ck Yourself – Gary John Bishop
“No esperes la victoria o la derrota. Planea para la victoria, aprende de la derrota.” – Gary John Bishop
La vida está llena de obstáculos. Puedes haber meditado durante 90 días, haber hecho un programa de ejercicios de 30 días o haber aplicado los consejos de cien libros de desarrollo personal y al final del día, sentir que sigues en una situación que no cambia. Es entonces cuando puedes encontrarte con un libro como el de Gary John Bishop y alucinar en colores.
Si en vez de leer el post preferís ver la reseña en vídeo, os dejo aquí el enlace a mi canal de Youtube, donde la podéis ver. Si preferís seguir leyendo, podéis saltaros el vídeo.
Desde que leí El Sutil Arte de que (Casi Todo) te Importe una Mi*rda, parece que solo me llamen la atención libros con palabras malsonantes en la portada. Y por eso cuando encontré Unf*ck Yourself (Deja de Joderte La Vida, en su traducción al español) de Gary John Bishop tuve muy claro que iba a ser mi siguiente lectura.
Bishop se parece un poco a Mark Manson: no se anda por las ramas y si te tiene que decir una verdad incómoda, te la suelta sin aditivos. Te deja alucinando y lo hace sin siquiera sudar a camiseta. Creo que a los dos autores les voy a colocar en la sección de “anticristos de los libros de desarrollo personal”, sin duda.
En este caso, Gary John Bishop nos habla de la importancia de dejar de repetir los mismos comportamientos destructivos que lo único que hacen es alejarnos de la verdadera vida que queremos llevar. Porque cuando conseguimos desenredarnos de nosotros mismos, podemos ir detrás de lo que queremos, conseguir lo que queremos y despertarnos todos los días pensando en aprovechar el día al máximo.
Toda su teoría la desarrolla en seis pasos, que a mi me llamaron especialmente la atención:
1. Cambia tu lenguaje
El lenguaje es muy importante porque al final somos lo que decimos. Hay que cambiar palabras negativas por positivas, porque si siempre nos decimos a nosotros mismos cosas como “esto es imposible” o “no puedo”, lo único que estamos haciendo es hacernos sentir frustrados, derrotados y enfadados.
En cambio, si utilizamos expresiones o palabras como “todavía no lo he resuelto” o “yo puedo”, la actitud que tomaremos frente a ese obstáculo seguro que será muy distinta.
2. Fomenta tu voluntad de cambio
Todo queremos ser millonarios y hacer lo que nos gusta todos los días de nuestra vida. Pero conseguir eso no es fácil y debemos estar preparados para asumir los riesgos que nos llevarán a ello. ¿Estamos preparados para no tener vacaciones, para trabajar más horas que un reloj o para apostarlo todo para vivir nuestros sueños? El éxito es impredecible, aunque trabajamos duro.
Hay que aprender a seguir para adelante si realmente queremos llegar donde nos proponemos. Da igual lo feas que se pongan las cosas, el objetivo es seguir hacia adelante.
3. Ten claro que todos los problemas se pueden resolver
Siempre tenemos control sobre nuestra vida y siempre podremos resolver lo que se nos ponga por delante. Aunque todavía no veamos la solución a ese problema, eso solo quiere decir que todavía no la hemos encontrado, no que no exista.
4. Nadie te bloquea el camino, solo tu mismo
Tendemos a pensar que nuestra vida sería mejor si nuestro jefe fuera más amable, si nuestro trabajo estuviera más cerca de casa o si en el centro médico nos atendieran mejor. Pero, lo cierto es que ninguna de estas cosas importa, porque no tienen control sobre nuestra vida.
Nadie está poniéndonos la pierna encima, como diría aquel famoso concursante de Gran Hermano. Las circunstancias de nuestra vida no nos limitan para poder tener éxito. Solo somos nosotros y nuestro lenguaje negativo los que nos ponemos piedras en el camino.
5. Eres tus acciones, no tus pensamientos
Vale, lo entiendo: no nos apetece ir al gimnasio, no nos apetece hacer ese curso y nos da una pereza increíble perseguir al jefe por ese aumento. Pues a Bishop le importa muy poco lo que nos apetezca o no. Porque no somos nuestros sentimientos y pensamientos. Somos lo que hacemos. Así que menos pensar y más actuar. Hay que hacerlo y así conseguir lo que queremos.
6. No esperes nada y acepta todo lo que venga
Puede ser realmente horrible trabajar duro y bien, haciendo las cosas como toca, pero finalmente no llegar a ningún sitio. Hay que aceptar que incluso las personas con más talento, a veces no llegan a ninguna parte. Y si no lo aceptamos, nos llevaremos muchas decepciones, porque estaremos esperando recibir el mundo a nuestros pies.
Hay que aceptar las pérdidas, los fallos y los contratiempos. Porque cuanto más grande sea el espacio entre lo que esperamos y lo que realmente sucederá, más insatisfechos nos sentiremos. Así que lo mejor es existir en el ahora, gestionar lo que nos pasa ahora mismo y seguir adelante. Eso es lo más importante.
Es curioso, porque tanto Unf*ck Yourself o Deja de Joderte La Vida como El Sutil Arte de que (Casi Todo) te Importe una Mi*rda tienen puntos en común, que me parecen realmente interesantes.
Debemos aprender a ser algo más realistas y a vivir menos cuentos de hadas. Porque vale más actuar y seguir hacia adelante, venga lo que venga, que arrepentirnos más adelante de no haber dado ese paso por miedo. Por lo menos yo, prefiero haber aprendido valiosas lecciones de los errores, antes que vivir toda una vida pensando “¿Y si…?”.
Nota: esta publicación puede contener enlaces de afiliados que me generan una pequeña comisión, sin coste adicional para ti. Solo recomiendo productos que personalmente uso y amo, o creo que a mis lectores les resultarán útiles.
1 comentario